Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos
Ricardo Cumming 1161, Santiago.
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CONDENAS, REBAJAS DE PENAS Y PRESCRIPCION
La ambivalencia en justicia, crea falsas señales de justicia .
La Corte Suprema no deja de sorprender en su permanente búsqueda de artilugios para que los violadores de derechos humanos reciban beneficios que los liberan prontamente de la cárcel.
La rebaja de penas y la aplicación de la prescripción para los asesinos de miles de chilenos, son las nuevas fórmulas de impunidad que se han ido instaurando sigilosamente, sin que el gobierno, el parlamento y la clase política reaccionen con la firmeza que ameritan los más graves, masivos y sistemáticos crímenes de la historia.
Los resultados son sanciones irrisorias y agraviantes o simplemente prescripción, lo que obviamente contraría las obligaciones que en materia de justicia, obliga a los Estados a hacer respetar y fortalecer la doctrina, los mecanismos y las normas que aseguren el recto y correcto ejercicio de la justicia, especialmente, en los procesos por crímenes contra la humanidad.
Los casos de los detenidos desaparecidos Juan Luis Rivera Matus, David Urrutia Galaz y en el día de hoy de Cesario del Carmen Soto González, Vidal Riquelme Ibáñez y del ejecutado político Rubén Antonio Acevedo Gutiérrez, demuestran que una nueva forma de impunidad se va instaurando sibilina mente.
La fórmula para delinquir y quedar prontamente libre, es asesinar masivamente, torturar masivamente y hacer desparecer masivamente.
Si estos crímenes se cometen además por agentes y con recursos del Estado, la gravedad de los hechos disminuye automáticamente.
La clase política tan dada a exigir "mano dura" para la delincuencia común, no tiene el mismo discurso para repudiar y exigir justicia sin privilegios en los delitos contra la vida, los más repudiables e irreparables.
Aquí es donde se prueba la coherencia o incoherencia del discurso con la realidad, esa realidad que desde el 11 de septiembre de 1973, no ha dejado de golpear la dignidad y derechos de las víctimas y sus familias.
Si la estrategia de los Tribunales es procesar y condenar, pero a la vez rebajar las penas en forma vergonzosa o aplicar la prescripción, no está haciendo justicia.
Tampoco está entregando a la sociedad señales claras e inequívocas que contribuyan a disminuir los ilícitos que a diario se cometen.
Contrariamente, lo que está quedando en el ideario colectivo es que si asesinar desde el Estado es legítimo, cada ciudadano puede sentirse libre para hacerlo.
Rechazamos la impunidad encubierta y demandamos de los Tribunales una conducta acorde con sus obligaciones y el término de los beneficios para los violadores de derechos humanos, los que sin duda, son los delincuentes más peligrosos para cualquier sociedad.
AGRUPACION DE FAMILIARES DE DETENIDOS DESAPARECIDOS
Santiago, 13 de noviembre de 2007.
fotos gentileza canal 13
ASAMBLEA NACIONAL POR LOS DERECHOS HUMANOS CHILE
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