Martes 1 de mayo 2012 17:25 hrs.
radio.uchile.cl
Una dura crítica a la conducción de Arturo Martínez en la multisindical realizó el presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre. El dirigente dijo que otras personas deben liderarla y fustigó el acuerdo con la CPC como ley muerta: "No tiene viabilidad en el mundo de los trabajadores reales. Podrán firmar lo que quieran, pero no nos representa", señaló.
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Mientras participaba de la conmemoración del 1 de mayo en Los Andes, el presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre (CTC), Cristián Cuevas, hizo un fuerte cuestionamiento a la actual dirección de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), encabezada por Arturo Martínez.
En entrevista con Patricio López en el Semáforo de Radio Universidad de Chile, el dirigente dijo que los trabajadores deben articularse con otros movimientos sociales para plantear un nuevo proyecto alternativo.
En ese sentido, cuestionó a la dirección nacional de la multisindical por lo que calificó como una conducción errática, temerosa de nuevos liderazgos y que no ha estado a la altura: “Necesitamos fortalecer la CUT como la principal organización de los trabajadores, recuperarla para su vocación de poder y con una clara convicción de clase. Para eso necesitamos generar redes, alianzas, nuevas mayorías, disputar la conducción, no fragmentar el movimiento sindical en pequeños reductos de personas, de colectivos. Muy respetables podrán ser, pero necesitamos de una unidad sindical y social”, dijo.
En esa línea, el dirigente sostuvo que la recuperación de la CUT pasa por “poner a otros hombres y mujeres que conduzcan este proyecto en base a lo que está cursando ya en la calle y en la opinión, superar nuestros propios errores. También soy parte de esos errores, no me exculpo de esa situación”.
En nombre de la CTC, Cristián Cuevas profundizó en sus cuestionamientos y manifestó su rechazo al acuerdo firmado por la CUT y la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC). “Y creo que interpreto también a la mayoría de los trabajadores del comercio, del retail, salmoneros, de la industria forestal, los trabajadores más precarizados”, agregó.
A su parecer, el convenio “primero, es inoportuno, porque se hace la firma simbólica cuando recrudecía la violencia, la criminalización, la persecución y represión contra el pueblo de Aysén. Segundo, porque es una renuncia a derechos fundamentales de los trabajadores, no es ganancia para nosotros y pone como énfasis el diálogo social y no la negociación colectiva como derecho fundamental, el derecho a huelga”.
Asimismo, indicó que el acuerdo desliga a las empresas y Estado de la seguridad de los trabajadores, de la cual tienen que hacerse cargo ellos mismos, y amplía la flexibilidad laboral, calificándolo como “un retroceso”.
“Es fácil firmar si no se tiene tropas, si no se tiene responsabilidad con trabajadores”, agregó Cristián Cuevas, quien sostuvo que en la CUT hay “un contrabando ideológico”.
Según señaló, “hay una disputa con un sindicalismo que se acostumbró a desarrollar la política de los consensos en los gobiernos de la Concertación, que fue un retroceso para nosotros y que sigue implementando esa misma política. Nosotros estamos en contra y la rechazamos, queda claro que ese no es el camino”.
“A uno le queda un tufillo bastante errático, confuso. Este acuerdo es ley muerta, no tiene viabilidad en el mundo de los trabajadores reales. Podrán firmar lo que quieran, concordar lo que quieran, pero nosotros no nos sentimos representados, es el sentir de la mayoría de los trabajadores”, concluyó.
ASAMBLEA NACIONAL POR LOS DERECHOS HUMANOS CHILE
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