En la mañana de hoy (viernes 3), se realizó el “Seminario constitucional de los pueblos indígenas: El debate pendiente”, iniciativa impulsada por la Universidad Alberto Hurtado en conjunto con la Corporación Proyectamérica.
El seminario estuvo marcado por las incompatibilidades que separan a la comunidad indígena de las propuestas de los políticos, algunos de los cuales manifestaron la necesidad de una constitucionalidad que integre al mundo mapuche.
Entre los representantes de los mapuche se encontraba Natividad Llanquileo, vocera de los presos políticos de la cárcel de Concepción, quienes profundizaron respecto a las diversas aristas que caracterizan el conflicto actual.
La discusión manifestó la necesidad de formular propuestas respecto a la creación de una reforma constitucional que considere los derechos y la diversidad cultural de los pueblos originarios, tema que cobró relevancia en los últimos meses a raíz de la huelga de hambre sostenida por 34 comuneros mapuche. En este sentido, Sebastián Donoso, asesor especial para Asuntos Indígenas del Gobierno, declaró que “el Estado necesita con urgencia reestructurar la constitucionalidad vigente en materia indígena”.
Donoso se refirió ampliamente a la frágil relación entre los mapuche y el Estado, y manifestó que “no será sano ni bueno que los mapuche tengan una colectividad totalmente elegida por ellos”.
La idea tras la propuesta de reforma, que fue apoyada por diversos actores de la oposición, entre ellos, la actual Presidenta del Partido por la Democracia (PPD), Carolina Tohá y la senadora Soledad Alvear (DC), originó una nueva discusión en torno a la forma de canalizar la propuesta, quien precisó que debe realizarse una consulta a las comunidades mapuches, argumentando que “no puede saltarse este procedimiento. Esto ha quedado detenido porque no podemos ponernos de acuerdo”.
UN TEMA DE MIEDOS
El debate político se da en un contexto de crisis y pérdida de confianza entre las autoridades y el mundo indígena, tras el quiebre producido en las negociaciones a causa de la aplicación de Ley Antiterrorista del Estado. Al respecto, Gonzalo Arenas, diputado UDI de la Araucanía, declaró: “Muchos dirigentes indígenas no han facilitado el llegar a un consenso, infundiendo miedo en las comunidades mapuche”.
Arenas especificó que la realidad de los pueblos indígenas no es igual a la de otros países. “Acá son minoría, por lo que también deben ser respetuosos de la democracia”. Además, reconoció en el sector de centro derecha un temor a la reestructuración de la constitucionalidad de los pueblos originarios, fundamentado en un “miedo al desorden y a la violencia”.
Por su parte, Carolina Tohá expresó que “la vocación por el orden y el carácter elitista de nuestro sistema político ha sido una complejidad adicional” en el caso del conflicto con los mapuches.
La propuesta discutida en extenso por los diversos representantes del mundo político fue desechada de forma en la intervención de Natividad Llanquileo: “Sobre reconocimiento constitucional no les voy a hablar porque no nos interesa”. En tanto, procedió a criticar el actuar del Gobierno y de las autoridades anteriores, asegurando que “los dirigentes han humillado nuestra historia. Si quieren respetarnos, déjennos ser como somos”.
Por otra parte, Llanquileo se refirió a las condiciones que ha tomado el juicio a los 34 comuneros mapuche, criticando a los medios de comunicación por no cubrir el asunto, acusándolos de no estar interesados en lo que está pasando. Agregó, además, que “el Gobierno sigue haciendo uso de las herramientas de la Ley Antiterrorista con testigos protegidos, convirtiendo la audiencia en un chiste”.
La postura de Llanquileo fue ampliamente apoyada por Juan Catrillanca, Nysol Lonco de Temucucui: “A mí se me ha engañado. Se me dice con muy lindas palabras que el territorio será devuelto, que el Estado mantiene una deuda con el pueblo mapuche”. Agregó, además, que “esta deuda debe repararse, no sólo se debe pensar en militarizar a la Novena Región”.
Catrillanca, quien se disculpó por su escaso manejo en el lenguaje “huinca”, llamó al werkén Mijael Carbone a terminar sus palabras, quien obtuvo los aplausos de la audiencia al señalar que “este pueblo ve al pueblo chileno como un hermano aliado, no como el Gobierno que nos ve como una amenaza a sus intereses económicos”. Para finalizar, expresó de forma enérgica: “Hoy día ustedes están viendo a un terrorista de la Novena Región que sólo busca reconciliarse con su territorio”.
La sesión fue cerrada con las palabras de Cristián Larroulet, ministro Secretario General de la Presidencia, quien afirmó que el Gobierno va a cumplir con los compromisos formulados al respecto, asegurando que están “intensamente comprometidos con esta causa”. Además, llamó a la ciudadanía a “juzgarlos por los resultados”.
Por Vanessa Vargas Rojas
El Ciudadano
ASAMBLEA NACIONAL POR LOS DERECHOS HUMANOS CHILE
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